Los sulfatos son tendencia aunque no precisamente en positivo. Se habla y mucho acerca de la conveniencia o no de determinados componentes que encontramos en nuestros champús y productos de higiene cotidianos. Hay varios nombres que están en conflicto actualmente y que las empresas fabricantes más comprometidas están trabajando por sustituir porque, a juzgar por algunos estudios, son sustancias de consecuencias bastante inciertas para la salud y que han mostrado ser agresivas con el pelo. Pero, ¿Cuáles son los efectos del sulfato en el pelo? Vamos a estudiarlos y a ver por qué motivos debemos optar por champús sin sulfatos.
Los sulfatos garantizan la limpieza
La piel, el pelo y lo que se les ponga por delante. Los sulfatos limpian y lo hacen con la mayor efectividad y sin dejar ni rastro de suciedad o grasa. No es raro así que las empresas encargadas de fabricar champús, jabones y otros productos de higiene quieran tener el sulfato entre sus ingredientes principales, dada su eficacia, su facilidad para la limpieza y su bajo precio. Podemos encontrar champús baratos gracias al sulfato, aunque esto no quiere decir que las grandes marcas no acudan al sulfato. Lo hacen. Porque limpiar, limpian muy bien.
Eliminan la grasa
Al tiempo que limpian, los sulfatos tienen la capacidad para disolver la grasa. De ahí que su uso en limpieza sea tan extendido en los productos para la higiene, pues quien más y quien menos tiene grasa en el rostro, o en pelo, que desea por todos los medios eliminar. Si los sulfatos limpian, quitan la grasa y dejan la piel impoluta, entonces no podemos pedirle más. ¿O acaso sí?
Fuera los lípidos
Lo que no pueden hacer los sulfatos es discriminar a la hora de la limpieza, entre lo que está bien y lo que está mal o, lo que es lo mismo, entre la grasa buena y la grasa mala. O tampoco entre la grasa que sobra y la que no. Por esto, un peligro que encierran los sulfatos es que desproveen de grasa a la piel y el pelo, pero lo hacen tan en profundidad que le quitan también los lípidos, es decir, esos aminoácidos esenciales, nutrientes básicos para la salud capilar y que hacen que el pelo esté precioso, sano y protegido.
Sin los lípidos o aceites naturales capilares, el pelo se queda sin su vestimenta o capa protectora, y con ello queda más vulnerable ante el sol, el calor, el frío, la contaminación, la suciedad ambiental, etc. El pelo queda más expuesto a sufrir daños permanentes o temporales a causa de la falta de lípidos.
Sigue leyendo:
Eliminan el tinte
De acuerdo, el sulfato o sulfatos limpian la piel, le retiran el sebo y los ácidos esenciales de las fibras capilares. Ahora bien, ya que limpia y quita, lo hace a conciencia, llevándose también los nutrientes buenos que debieran quedarse con nosotros nutriendo nuestra piel o pelo, y los tintes para el pelo. Lo sabemos, esto es una pesadilla si tienes el pelo teñido y tienes que ir cambiando y renovando tu tinte. Pero es lo que hay si decides usar champús con sulfatos, así que simplemente te decimos que ya tienes una razón más para escoger champús sin sulfatos. Tu tinte durará más, tu pelo estará más bonito y tú estarás más saludable.
Agreden la piel
Realizar una limpieza muy profunda conlleva necesariamente una agresión a la piel, porque date cuenta que tienes que penetrar mucho en la piel y disolver todo lo que tiene encima para arrastrarlo y sacarlo fuera. Cuanto más en profundidad limpia un químico, más agresivo es, o al menos a priori. Y los sulfatos no son una excepción.
Limpiar con sulfatos tu cabello, tu cuero cabelludo o tu piel supone una agresión a las capas superficiales y medias que pueden causar daños, sobre todo a personas de piel sensible o cabello delicado. ¿Sabes cuando te haces un peeling, que este es agresivo con la piel? Pues imagina someter a la piel de tu cuero cabelludo a diario, o cada dos días. Los daños pueden ser grandes.
Causan alergias
Los sulfatos a fin de cuentas son un producto químico. Las sustancias químicas o artificiales son sustancias ajenas al cuerpo que pueden provocar una respuesta de defensa del organismo hacia ellos y, en este caso, una respuesta de la piel (incluyendo al cuero cabelludo), manifestándose en forma de alergias. No es raro que la cabeza pique, que aparezca prurito, granitos o ardor, e incluso que tenga enrojecimiento e inflamación por algunas zonas. Síntomas típicos de cualquier alergia cutánea.
Hace que caiga el pelo
Al desproveer de sus aceites naturales al pelo, lo deja al aire, en peligro frente a todas las agresiones a las que se somete cada día y, también, deja al pelo sin nutrientes. La consecuencia es un pelo más débil, fino y con tendencia a la caída. Tendrás un pelo sin vida, sin la suficiente hidratación, con carencias nutricionales y, en ocasiones, con descamaciones.
Empeora el eczema
La piel delicada tiene eczemas por poca cosa. Un rasguño, una mala noche donde no dormimos. un exceso de calor o sudoración. Son algunos de los factores que hacen que padezcamos eczemas. Y es por eso que se recomienda el uso de champús sin sulfatos, para que surjan conflicto entre cuál champú escoger.
Pelo sin brillo
Si tu pelo no está bien cuidado, por más que haya no lucirá bien ni se verá bien. Y es que ha sido muy feliz, pero apenas cuando niña.
¿Has visto cuántos efectos tienen los sulfatos en el pelo? Ahora ya puedes analizar todos y sacar conclusiones positivas y negativas, para decidir si seguir usando un champú con sulfatos, y otro que no lo llevan.
Te puede interesar: