Para muchos futuros padres escuchar los latidos del corazón de un bebé por primera vez en la vida se convierte en un hito tan emocionante como único, difícil de olvidar, especialmente si son primerizos y se trata, por tanto, del primer embarazo (aunque, en definitiva, en el segundo o en el tercer embarazo también es un momento memorable e igual de importante). Pero, ¿desde qué semana es posible detectarlo?.
El latido cardíaco fetal puede ser detectado mediante un ultrasonido vaginal tan pronto como entre la semana 5 o 6 de gestación, que es cuando el corazón tiende a ser más visible, y es posible observar la existencia de un primer latido.
Aunque quizá sea demasiado pronto, y esto pueda no ocurrir. De ser así, quizá lo más probable es que la concepción se haya producido un poco más tarde de lo que crees, y no es una señal o un indicativo de que algo vaya mal, simplemente te has realizado el ultrasonido muy pronto.
De hecho, entre las 6 semanas y media y la semana 7 de gestación sí es posible evaluar mejor el latido cardíaco. Es entonces cuando, por ejemplo, tu médico puede programar la realización del primer ultrasonido abdominal, aunque también puede ser posible continuar haciéndolo vaginal, con el fin de verificar si existen señales de un embarazo saludable, y en desarrollo.
¿Qué podemos esperar en la primera cita de ultrasonido?
Si vas a una clínica privada es probable que acudas antes a tu primera cita con el ginecólogo, especialmente si anteriormente ya te realizabas revisiones de rutina cada cierto tiempo. En caso contrario, es posible entonces que la primera consulta se demore hasta la semana 12 de embarazo, cuando el dermatólogo o la tocóloga te realizará la primera ecografía o ultrasonido.
Se trata de una exploración en la que el médico utiliza un ultrasonido transvaginal, o bien un ultrasonido abdominal 2D o 3D (aunque lo más habitual es que, al comienzo, se realice únicamente transvaginal), ya que es la prueba de elección para obtener una imagen más clara del embrión.
No obstante, después de una prueba de embarazo positiva, si acudes a un médico privado es muy común que pueda recomendarte la realización de una primera ecografía temprana del embarazo, alrededor de la semana 7 y 8 de embarazo. Aunque, como te hemos comentado, algunas clínicas no la hacen hasta la semana 11 o 14 de embarazo.
En cualquier caso, es posible que tu médico te recomiende la realización de esa ecografía temprana si, por ejemplo, tuviste algún aborto espontáneo en el pasado, tienes una enfermedad o condición médica previa, o tuviste dificultades para mantener un embarazo normalmente en el pasado. Obviamente, la programación de dicha prueba temprana no significa que vaya algo mal; simplemente se realiza por prevención, y para asegurar que todo va como debería.
Así, se realice antes o después, durante la primera cita de ultrasonido el médico confirmará la existencia -o no- de un embarazo viable, verificando si existe un embarazo ectópico o un embarazo molar, confirmar la presencia de latido cardíaco fetal, medir la longitud de la corona del feto si es posible (lo que ayudará a determinar su edad gestacional), y evaluar si se trata de una gestación normal o anormal.
¿Puede ser posible que no se escuchen los latidos del corazón del bebé?
Como te hemos comentado anteriormente, puede ser perfectamente posible que en el primer ultrasonido no escuches los latidos del corazón del bebé. En la mayoría de las ocasiones, esto es debido a que la prueba se realiza muy temprano, y no tiene por qué significar que, necesariamente, exista algún tipo de problema.
Si en la primera ecografía no se detecta latido, pero todo lo demás va como debería, es posible que tu médico te recomiende programar otro ultrasonido pasados 7 o 15 días.
En cualquier caso, ten en cuenta que el médico controlará en cada cita los latidos del corazón del bebé. Y es perfectamente posible que puedas escuchar los latidos del corazón del feto por primera vez a partir de las 6 semanas de gestación.
Pero si te preocupan los latidos del corazón del bebé es recomendable que hables con tu médico, especialmente si el temor te genera estrés, ansiedad y nerviosismo. El embarazo es una etapa maravillosa y única, pero que también puede estar plagada de temores y miedos. Habla con tu médico y despreócupate. Será lo mejor para que disfrutes de este momento tan bonito.